Saltar al contenido

Siete zumos y batidos ricos y bajos en calorías

14/06/2017

Con la inminente llegada del verano a todos nos surgen las prisas por perder esos kilos de más que nos hacen sentir incómodos y que si no los atajamos a tiempo, se pueden convertir en un problema, no solo estético, sino lo que es más grave, para nuestra salud. Un buen aliado para acompañar el necesario ejercicio físico y la dieta equilibrada son los zumos y batidos naturales con frutas y verduras. Son un complemento perfecto para nuestra dieta y ofrecen una amplísima cantidad de posibles combinaciones para que no nos aburramos.

Los zumos no solo son ricos y refrescantes, también son diuréticos naturales, ayudan a eliminar líquidos y nos aportan en un solo gesto una gran cantidad de vitaminas y minerales necesarios para nuestro organismo. Y si los tomamos entre horas, antes de las comidas, nos ayudan a controlar el apetito y el picoteo compulsivo. Un consejo: consume los zumos con toda la pulpa, e incluso en los casos que se pueda, con la piel. Ambos contienen una gran cantidad de fibra perfecta para regular el tránsito intestinal, y además nos sacian más que si tomamos solo el líquido.

Ahora vamos a exponeros varias posibilidades para que las pongáis en práctica en casa, pero no olvidéis que vosotros mismos podéis echarle imaginación y crear vuestros zumos de frutas y verduras con lo que tengáis en la nevera y con una base de jugo de limón, naranja o ambos.

1. Zumo de pomelo y zanahoria: el pomelo es un gran quema- grasas y tiene mucha fibra y minerales. Combinado con la zanahoria, que es diurética y tiene un gran poder saciante, nos sale un zumo de lo más completo. Y además, activamos de forma natural el proceso de bronceado de la piel. A esta combinación le podemos añadir naranja, limón y un trocito de mango o papaya.

2. Zumo de kiwi y espinacas: con un kiwi, tres hojas de espinacas y jugo de limón o lima, obtenemos un zumo muy rico en fibra, minerales y antioxidantes. Podemos añadirle un poco de té verde u hojas de lechuga, col rizada, brócoli… según el gusto, pero siempre guiándonos por ingredientes de color verde.

3. Batido de piña: es uno de los grandes compañeros de batalla a la hora de perder peso. La piña es muy digestiva, bajísima en calorías y de un rico sabor muy refrescante. Si batimos un par de rodajas de piña en su jugo, con un poco de zumo de limón y un yogur blanco desnatado, obtenemos un riquísimo batido con el que ‘engañaremos’ el estómago. Este tipo de combinaciones de frutas con yogures también son ideales para que los niños coman fruta.

4. Zumo de sandía y picotas: es una de las reinas del verano en todas las neveras y en muchos hogares nunca falta la tajada de sandía como postre. Pues bien, os proponemos consumirla entre horas, batiéndola una vez eliminadas las pepitas y si tenemos un resto de picotas o cerezas, añadirlo sin miedo. Y si nos apetece hacer más cantidad y guardarlo en la nevera, basta con añadir a la batidora el zumo de un limón, que es un conservante natural.

5. Zumo de espárragos, apio y pepino: si te atreves con otro zumo verde, aquí tienes una buena opción para consumir estas verduras crudas y de un solo golpe, con todas sus propiedades intactas. Son diuréticas, bajísimas en calorías, beneficiosas para la piel y para el sistema cardiovascular. Basta con un par de espárragos verdes, un trozo de apio con el grosor de dos o tres dedos, otro de pepino, y un vasito de zumo de limón.

6. Batido de mango o papaya: ojo con esta fruta porque tiene una mayor cantidad de azúcares, pero es muy saciante y muy rica en Vitamina C y minerales. Utilizando la misma fórmula que con la piña, si mezclamos un trozo de mango con un yogur desnatado nos sale un batido sabroso y un postre delicioso con el que poder sorprender a tus invitados en una cena veraniega. Si lo deseas, añade en la presentación un poquito de coco o chocolate negro rayado por encima, y triunfarás.

7. Zumo de perejil y limón: quizás el más complicado de consumir de todos los de la lista, porque su sabor no es precisamente el más atractivo. Pero su poder es absoluto si queremos depurar los intestinos y los riñones, perfecto para esas pesadas jornadas digestivas después de un día de fiesta o barbacoa con amigos. Si te acostumbras a tomarlo en ayunas, media hora antes del desayuno, aumentarás su poder y comenzarás el día con energía y una sonrisa.

También te puede interesar:

 

Settings