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Cómo preparar un botiquín familiar para viajes

13/07/2014
Cómo preparar un botiquín familiar para viajes

Si no quieres que los pequeños accidentes arruinen tus vacaciones en familia, lo mejor es que incluyas un botiquín básico en la maleta que te permita paliar contratiempos leves como dolores de cabeza, de estómago, pequeñas heridas o dolores musculares.

VER TAMBIÉN: Cómo disfrutar de las vacaciones en familia

  • Mareos: tanto si viajáis por carretera, en tren o en avión, puede darse la circunstancia de que algún miembro de la familia se maree, especialmente los niños. Para prevenir estas situaciones debes ir provisto de antieméticos (medicamentos para el mareo) y suministrarlos a quien lo necesite antes de cada viaje siguiendo las indicaciones del prospecto.
  • Dolores de cabeza: lleva siempre contigo un termómetro, así como analgésicos y antipiréticos apropiados para las edades de los diferentes miembros de tu familia. Alívialos con paracetamol o ibuprofeno, en caso de que vayan acompañados de molestias musculares o inflamaciones. Te ayudarán a sofocar las fiebres leves y dolores de cabeza para poder continuar cuanto antes con tus planes de ocio vacacional. Recuerda que el ibuprofeno debe tomarse acompañado de alimentos para mitigar los efectos en el estómago.
  • Diarreas: ten en cuenta que, sobre todo cuando viajamos al extranjero, estamos más expuestos a padecer la «enfermedad del viajero» debido a que consumimos agua y alimentos diferentes a los de nuestra dieta habitual. Incluye en tu botiquín antidiarréicos para atajar con rapidez este tipo de molestias ocasionales. Además, lleva contigo alguna solución de suero oral para garantizar la correcta hidratación del que lo padece.
  • Rozaduras y heridas: viaja siempre acompañado de antisépticos como iodopovina, alcohol o agua oxigenada para desinfectar heridas o rozaduras causadas por caídas o molestias con el calzado. Además, lleva tiritas, gasas, vendas esparadrapo y apósitos con tratamiento calmante que puedan aislar las heridas y permitir que prosigan las vacaciones con normalidad.
  • Para la acidez estomacal: recuerda incluir antiácidos para soportar los excesos habituales de las vacaciones, especialmente si alguno de los adultos de tu familia tiene tendencia a este tipo de malestares. Utiliza en ese caso protectores estomacales para prevenir.
  • Golpes y dolores musculares: si vais a realizar deportes, actividades de aventura o algún tipo de ejercicio es posible que sufráis golpes leves, pequeñas contracturas o molestias musculares.
  • Protección contra el sol: lleva contigo siempre protector solar de gran espectro para que toda la familia esté a salvo de los peligros de la radiación solar. Es conveniente también incluir en el botiquín aloe vera para acondicionar la piel tras la exposición al sol y las posibles quemaduras solares.
  • Repelente para mosquitos: sobre todo si viajas a climas tropicales, conviene llevar repelente antimosquitos y productos para aliviar las picaduras.

Además, recuerda viajar siempre con las tarjetas sanitarias de toda la familia a mano por si es necesario acudir a un centro de salud u hospital durante las vacaciones. Incluye también las medicaciones diarias que los miembros de tu familia necesiten habitualmente (como inhaladores, antihistamínicos o insulinas) y procura llevar contigo los informes médicos y recetas que las acrediten, especialmente si viajas a otro país.

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