La alfombra es para el invierno. Es algo que tenemos grabado a fuego. Fundamentalmente, porque siempre pensamos en alfombras de lana, que están pensadas para aportar calidez a tu hogar y aislarnos del frío del suelo. Pero vamos a darle la vuelta a esa esa idea, porque también se puede decorar en verano con alfombras realizadas con materiales más frescos y ligeros que darán un toque estival a la decoración de tu casa. Una alfombra es un elemento perfecto para darle personalidad a una estancia, ya sea en el interior o en el exterior de tu casa. Lo importante es elegir bien el material en función del espacio que vas a decorar y aliarte con el colorido para conseguir ese puntito alegre que nos pide el verano.
Aquí van unos cuantos consejos:
Materiales naturales
Apúntate a esta tendencia ecofriendly llenando tu casa de piezas artesanales. Aunque son aptas para usar en cualquier época del año, las alfombras realizadas en fibras naturales son las más indicadas para la decoración veraniega, ya que dan un toque fresco a cualquier habitación. Dentro de los materiales naturales puedes elegir diferentes fibras dependiendo de tus necesidades:
- de bambú: las alfombras realizadas en este material son características por ser suaves y resistentes, además de ser aptas tanto para interior como para exterior.
- de algodón: suelen ser fáciles de lavar y suaves al tacto, por lo que se convierten en las alfombras ideales para colocar, por ejemplo, en el dormitorio. Además tienen una gran variedad de colorido y estampados, lo que te permite jugar con la decoración de cualquier estancia.
- sisal o yute: dan luz y naturalidad al espacio. Aunque su aspecto pueda ser más o menos parecido, las alfombras de yute son mucho más suaves que las de sisal y pueden usarse en exteriores, siempre y cuando estén a cubierto. El sisal, en cambio, puedes utilizarlo en cualquier punto del interior de la casa ya que ofrece una gran resistencia y tiene una gran durabilidad.
Materiales sintéticos
Son materiales muy recomendados para el exterior de la casa porque pueden mojarse sin problema y ofrecen una buena resistencia a los rayos del sol. Además, son el perfecto aliado de los alérgicos a los ácaros, ya que son fáciles de limpiar y no acumulan prácticamente polvo. Puedes usarlas no sólo en tu jardín o terraza, sino también en el baño o en la cocina. Hay muchos diseños originales de alfombras vinílicas, polipropileno o plástico trenzado que pueden dotar de mucha personalidad estas estancias de la casa, además de cumplir con una buena función práctica para evitar que el suelo se ensucie en exceso o aislarlo de la humedad.
Colorido y estampados
Kilim: lo étnico está de moda, y sin duda llena de alegría cualquier habitación, una buena opción para un dormitorio. Te transportará a un idílico viaje repleto de exotismo. Una alfombra roja: puede ser la aliada perfecta para llenar de vitalidad un salón con suelo blanco de mármol o piedra. El verde: sin duda, la opción perfecta para llevar el exterior al interior de la casa y dar frescura a cualquier habitación.
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