El moho es un invitado indeseable muy frecuente en nuestros baños. Al tratarse de estancias que acumulan humedad y condensación a diario, especialmente en invierno, es inevitable que con el paso del tiempo el moho acabe apareciendo. La falta de ventilación en los baños contribuye a que aparezca el moho, ya que las superficies no tienen tiempo de secarse entre usos. El baño puede estar impecable, pero si conseguimos limpiar el moho incrustado en las superficies, la sensación será de poca higiene y aspecto descuidado.
La tarea se complica especialmente en bañeras y duchas, cuyo estado se acaba deteriorando por la presencia de esta sustancia ennegrecida. La dificultad de acceso (sobre todo en la bañera) y el uso continuo nos lleva a veces a acostumbrarnos a la presencia de moho, que no resulta nada higiénica. Pero, puesto que con la limpieza habitual no se retira, ¿cómo limpiar el moho de la bañera entonces?
En primer lugar, debes saber que, una vez se ha acumulado el moho en los rincones de tu baño, tendrás que llevar a cabo un tratamiento para eliminarlo y devolver a las superficies el color original. Una vez hecho esto, bastará con una limpieza de mantenimiento para evitar que el moho vuelva a aparecer, especialmente con la intensidad que lo había hecho antes.
Te recomendamos que recurras a alguno de estos dos trucos para limpiar el moho de la bañera o la ducha:
1. Agua, lejía y limpiador de baño: retira cualquier resto de la bañera o la ducha con ayuda de la presión del agua. Después, pulveriza una mezcla de agua, con un chorrito de lejía y unas gotas de jabón (el que usas para limpiar el baño servirá). Incide especialmente en las juntas de las baldosas que tengan moho así como en la línea alrededor de la bañera o ducha, que es donde se suele acumular y más difícil resulta eliminarlo. Deja que la mezcla actúe unos 30 minutos y después frita bien los sitios más complicados con ayuda de un cepillo de dientes. Al aclarar con agua, comprobarás que las zonas que antes tenían moho se han blanqueado.
Si es necesario, repite la operación y frota de nuevo las juntas con el cepillo de dientes.
2. Bicarbonato de sodio y vinagre: elabora una mezcla con un vaso de agua caliente y tres de vinagre blanco y añade una tacita de bicarbonato. Introduce la mezcla en un envase con pulverizador y agítalo bien antes de usarlo (si lo prefieres, puedes preparar la mezcla directamente en este envase). Deja que el producto actúe sobre las zonas afectadas durante media hora y después frota con un cepillo de dientes para terminar de quitar las manchas de moho. Aclara toda la superficie con agua caliente apra finalizar.
Cuando el moho ha afectado a la silicona, algo que suele ocurrir porque no hemos aplicado el producto adecuado o bien porque ha pasado mucho tiempo desde su colocación, la limpieza no conseguirá limpiar la junta de tu bañera. En este caso, tendrás que retirar la silicona vieja y aplicarla de nuevo, cerciorándote de que es específica para baños.
Para retirarla, aplica un producto eliminador de silicona, deja que actúe y utiliza un cúter una vez la silicona se haya ablandado. Luego puedes quitar los restos con una nueva aplicación del mismo producto y dejar la zona bien limpia para la aplicación de la nueva silicona.
También te puede interesar: