La petunia es una planta de llamativas flores de colores que pertenece a la familia de las solanáceas. Curiosamente, la misma familia a la que pertenece la planta del tabaco, la patata o el tomate. De hecho, su nombre procede de una lengua indígena guaraní y significa «planta de tabaco inútil». Las petunias pueden tener flores de casi cualquier color y pueden llegar a crecer hasta el medio metro aproximadamente.
Son ideales para los parterres de jardín, ya que las petunias crecen en forma de macizo, si bien también se plantan en jardineras y macetas.
Necesitan estar expuestas a pleno sol, por tanto, en espacios muy luminosos, con al menos 5 horas de sol. Si la petunia no cuenta con las horas de sol necesarias, no florecerá. Además, aunque aguantan bien las temperaturas altas, su clima ideal está entre los 15 y los 25 grados. Las petunias son anuales, ya que florecen en la temporada primavera-verano y cuando llega el invierno se marchitan. Dependiendo del clima de la zona en que las plantemos, pueden incluso aguantar todo el invierno.
Requieren ser regadas a diario, especialmente en verano, para evitar que el sustrato se seque, si bien nunca debe quedar encharcado, especialmente cuando hablamos de pequeñas macetas. El clima ideal para esta planta es el seco. De hecho, ten cuidado de no mojar las flores ni las hojas cuando la riegas.
Cómo plantar petunias
Si, en lugar de comprar macetas en un vivero, decides plantarlas tú mismo, a partir de sus semillas, ten en cuenta estos consejos:
– Las semillas de petunia son muy pequeñas y no es difícil sobreplantar. Guarda un espacio de unos 20 cm entre semilla y semilla.
– Puedes colocar un plástico para retener la humedad mientras las semillas germinan.
– La época ideal para plantar semillas de petunia es en el mes de marzo, teniendo en cuenta que que suelen florecer hacia junio.
– Planta tus semillas en un lugar luminoso, pero en el que el sol no pegue directamente.
– Para plantar una petunia necesitarás mantillo para mantener la humedad constante, así como enriquecer con abono. El suelo ideal para plantarlas debe ser rico y bien drenado, ya que tienen raíces superficiales. En época de floración, necesitan que apliquemos abono cada 15 días.
– Si vas a emplear una maceta, te recomendamos una de grano ancho, para drenar bien el agua. Coloca un poco de grava en la base de la maceta y después, el sustrato. Rellena de sustrato hasta el cuello de la maceta y presiona con la mano para hacer la «cama» de las semillas. Entonces, colócalas con cuidado y cubre con una capa de sustrato.
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