Las flores secas son un elemento decorativo frecuente en los hogares ya que alegran los espacios y le dan un toque romántico y vintage a nuestras estancias. Muchas personas incluso secan sus propias flores para decorar los rincones de la casa. El problema es que con el paso del tiempo, los centros de flores secas tienden a acumular gran cantidad de polvo y suciedad y su limpieza se convierte en todo un reto. ¿Cómo hacemos para limpiar flores secas?
Aquí te ofrecemos algunos de los trucos más útiles que, combinados con una limpieza habitual, mantendrán tus flores secas como el primer día:
– Usa el secador: con el modo «aire frío» seleccionado, aplica aire sobre tu centro de flores secas a una distancia media. Ha de ser la suficiente para levantar el polvo sin que las hojas o las flores se desprendan. Es aconsejable realizar esta tarea en un lugar exterior como una terraza para evitar que el polvo que desincrustamos de las flores se deposite en otros lugares de la casa.
– Productos para limpiar teclados: los productos que comercializan para eliminar la suciedad que se acumula en los teclados de ordenador son ideales para limpiar flores secas. Y es que basan su efectividad en la acción del aire comprimido que puede desincrustar el polvo pegajoso acumulado en tus flores secas. Úsalo para alcanzar las zonas de difícil acceso, sobre todo si nunca has limpiado esta planta seca.
– Sal gruesa: utiliza este truco cuando la suciedad de tus flores secas no se desincruste fácilmente. Para ello, deberás meter un puñado de sal gorda en una bolsa de plástico e introducir el ramo o centro de flores secas boca abajo. Entonces, cierra la bolsa y agítala con suavidad para que los granos vayan golpeando las hojas y flores y arrastrando la suciedad a su paso. Comprueba de vez en cuando el estado de tus flores secas y continúa agitando durante un par de minutos. Lo normal es que cuando hayas terminado la sal haya cambiado de color al impregnarse de la suciedad.
– Usa pinceles: con la ayuda de pinceles limpios podrás eliminar el polvo y la suciedad más superficial de tus centros de flores. Repásalas cada vez que hagas limpieza general y después pasa el aspirador para eliminar el polvo que se haya desprendido.
– Agua, para la suciedad rebelde: si nunca has limpiado tu centro de flores secas, puede que los remedios anteriores no logren acabar con la suciedad acumulada. Entonces puedes probar lo siguiente: pon a hervir una cazuela de agua y cuando rompa, añade media taza de bicarbonato de sodio. Remueve para que se mezcle bien y luego retira la olla del fuego. Deja que se enfríe y entonces mete las flores secas a remojo y déjalas dentro durante cinco minutos.
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