Estrenas año nuevo y todo son buenos deseos y propósitos de mejora. Pero, fuera de comerte las uvas, brindar y pedir un deseo, ¿haces algo por conseguir lo que quieres en el año nuevo. Aquí te damos siete claves para afrontar el 2018 con buen pie para alcanzar tus principales propósitos sin necesidad de que te toque la lotería.
– Identifica tus principales grandes objetivos: no intentes cambiarlo todo y mejorar en todos los aspectos de tu vida. Lo mejor es concentrarse en lo que más necesitas cambiar y darle prioridad. Cuanto más definida sea la meta, más fácil será llegar y mejor te sentirás después.
– Divide ese objetivo en otros más pequeños: lo mejor es establecer una serie de pasos o etapas a superar antes de conseguir el gran objetivo que te has marcado para 2018. Por ejemplo, si tu objetivo es mejorar tu figura, comienza por pequeños cambios en tu dieta habitual, introduce y elimina alimentos, consigue hacer ejercicio al menos 3 veces por semana, etc.
– Calendario de pequeños objetivos: puedes elaborar un calendario con estos pequeños objetivos para marcarte un ritmo realista e ir consiguiendo poco a poco lo que pretendes. El día 10 de enero no habrás conseguido todo lo que te proponías, pero podrás vislumbrar el primer pequeño objetivo y valorar si estás en el camino para lograrlo.
– Evalúa lo que no funcionó en 2018: evita repetir las conductas o decisiones que te alejaron de tus objetivos el año pasado. Si por ejemplo el año pasado no conseguiste ir a gimnasio con regularidad quizá es que no has encontrado la clase dirigida o disciplina que te gusta. Cambia para encontrar lo que te motiva.
– Piensa en impresionar a alguien: utiliza como motivación el hecho de sorprender con tus logros a esa persona que no acaba de creer en ti y que piensa que vas a fracasar. Los días que flaquees, piensa en esa persona y te ayudará a seguir adelante.
– Elabora un plan de trabajo: ya sea para evolucionar en tu puesto de trabajo o para embarcarte en una nueva carrera profesional, lo mejor es marcar una hoja de ruta clara que te permita mantener un ritmo razonable que te permita avanzar.
– Madruga una hora más: levántate antes de lo que lo hacías el año pasado (si es posible) desde el mismo 2 de enero y emplea esa hora extra de cada mañana para alcanzar tus metas. Te sorprenderá lo mucho que puedes conseguir en un año con una hora extra al día.
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