¿Sabías que, además de los factores genéticos, la celulitis está directamente relacionada con el tipo de alimentación? Los tratamientos estéticos para eliminarla solo nos proporcionarán una solución temporal ya que, si no cambiamos nuestros hábitos alimenticios, la celulitis volverá a aparecer. El ejercicio habitual ayuda a mantenerla a raya, ya que activa la quema metabólica de grasas, pero sin duda solo cuando se acompaña de una alimentación sana tiene un verdadero efecto contra la celulitis. Por lo general, la celulitis está asociada con una dieta pobre en fibra natural (cereales integrales, frutas y verduras) y, por el contrario, rica en grasas y azúcares.
La celulitis se aloja en la hipodermis (capa de la piel que se sitúa bajo la epidermis y la dermis), donde se acumula el exceso de grasa y toxinas del cuerpo en forma de adipocitos. La función de estos es la de amortiguar y mantener la temperatura corporal es causada Toda esa grasa se acumula en nuestro cuerpo por la mala alimentación y la falta de desgaste, aunque también puede verse agravada por casos de mala circulación, por ejemplo. Esos desechos que nuestro organismo no puede asimilar ni desechar, se van acumulando en zonas localizadas, especialmente glúteos, abdomen y piernas, haciendo que aparezca de forma visible la odiada piel de naranja. La razón por la que los adipocitos proporcionan ese aspecto abultado a la piel es que van aumentando su tamaño poco a poco, de forma que se aumenta la presión sobre la piel hasta que se manifiestan en forma de relieve estas protuberancias grasas.
Alimentación contra la celulitis
¿Qué debe contener nuestra dieta para evitar o reducir la celulitis?
– Agua: la hidratación es clave para eliminar toxinas y reducir la retención en las zonas localizadas. Al menos, un litro de agua al día. En ningún caso debe sustituirse por zumos industriales o bebidas azucaradas.
– Alimentos ricos en fibra: frutas y vegetales deben dominar la dieta Pero también puede haber cereales integrales (pan, pasta y demás derivados elaborados con harina 100% integral).
– Cítricos: frutas como el pomelo, el kiwi, la naranja, el limón, la fresa o la piña proporcionan vitamina C a nuestro organismo, que resulta fundamental para reducir la celulitis.
– Proteínas no grasas: es aconsejable consumir proteínas en mayor proporción que grasas y carbohidratos. Principalmente pescados, carnes blancas (pollo, pavo y conejo) y huevos, ya que potencian la quema de células grasas. También se incluyen los lácteos desnatados o el queso fresco.
– Infusiones de té verde y té rojo: tienen propiedades diuréticas, ideales para eliminar toxinas.
– Alimentos cocinados al horno, al vapor o en papillote son preferibles.
Productos a evitar
Esto es lo que debes eliminar de tus hábitos si pretendes combatir la celulitis:
– Carnes grasas como el cerdo o el cordero.
– Embutidos, fiambres y procesados en general.
– Fritos (sustituye por hervidos y cocinados en el horno y el microondas).
– Dulces y bollería industrial.
– Bebidas edulcoradas, como zumos industriales, refrescos y batidos.
– Harinas refinadas y sus derivados (todas aquellas que no son integrales).
– Alimentos ricos en sal.
– Alcohol, café y bebidas estimulantes.
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