Durante el verano hidratarse es esencial para soportar los días más calurosos, especialmente si realizamos actividades al aire libre o estamos expuestos al sol. Aunque las bebidas representan un 80% de la hidratación en nuestro cuerpo, debemos tener en cuenta que los alimentos aportan el porcentaje restante de agua en nuestro organismo.
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Por eso, para afrontar las altas temperaturas de los días más caluroso del verano conviene reforzar la hidratación consumiendo alimentos que la favorezcan, combinados con bebidas que nos refresquen y aporten agua al organismo también.
Entre las bebidas más apropiadas para hidratar el cuerpo te proponemos:
- Agua con limón: la limonada (agua, limón y azúcar) es una bebida muy efectiva para la hidratación, que además proporciona una sensación refrescante al instante.
- Batidos naturales: mezcla leche (desnatada si quieres que sea más ligero) con casi cualquier fruta en la batidora y en segundos obtendrás una refrescante bebida que vale por dos: alimenta e hidrata. Igualmente, la leche funciona como hidratante y refresca en verano si se toma directamente del frigorífico.
- Zumos naturales: durante el verano, pon a trabajar tu licuadora y tu exprimidor para hidratarte con sabrosos zumos de frutas
- Horchata: ideal para reponer fuerzas tras hacer ejercicio en verano, puesto que te hidrata y te ayuda a reponer energías. Además, es rica en ácidos grasos insaturados (los buenos).
- Té: ya sea helado o caliente, su contenido en agua lo convierte en un recurso muy apropiado para los desayunos o meriendas en verano. Lo mismo sucede con cualquier tipo de infusión.
- Bebidas isotónicas: recomendadas para recuperar azúcares y sales minerales tras el ejercicio, resultan especialmente apropiadas en los días más calurosos.
Alimentos para hidratarse
- Frutas: la mayoría resultan ideales para hidratar el organismo en los días de más calor debido a su altísimo porcentaje de agua. Especialmente la sandía, el melón, la manzana, la piña, el kiwi, la pera o la uva.
- Gazpacho: un excelente primer plato para las comidas de verano porque refresca, es ligero y nos aporta la hidratación y nutrientes ideales para nuestro buen funcionamiento.
- Verduras: ideales para consumir en los días más calurosos ya sea en ensalada, hervidas o rehogadas. En especial, lechuga, tomate, espinaca y pepino. También son ideales los batidos de hortalizas.
- Pescados: el salmón, el atún el bonito, la merluza, las sardinas o las anchoas aportan hidratación al organismo con su consumo.
- Carnes: para sorpresa de muchos, puede contener un alto porcentaje de agua, aunque se recomienda reducir su consumo en verano por la alta concentración de grasas animales y porque puede hacer más pesada la digestión.
- Sopas: por su alta proporción de agua sirven como fuente de hidratación en comidas y cenas.
- Gelatinas: son un postre ideal para los días calurosos del verano ya que hidratan y refrigeran nuestro cuerpo. Prepáralas con frutas para que se conviertan en un alimento aún más completo.
- Yogur: al igual que la leche, refresca e hidrata por su alto porcentaje de agua.
En general, en los días de más calor se recomienda evitar la comidas saladas para evitar que el organismo necesite un plus de hidratación para diluir ese sodio.
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