Los smartwatch -relojes inteligentes- o pulseras deportivas están de moda, es indudable. Pero si bien existen cientos de modelos diferentes en el mercado, la realidad es que no todas hacen lo mismo, por lo que es importante tener en cuenta una serie de cosas a la hora de adquirir una. Así, que si precisamente estás pensando en ello, te interesarán los consejos que vamos a ofrecer a continuación.
Ten claro qué buscas
Es muy común comprar por impulsos y también por ello equivocarse, lo que en este caso no va a ser una excepción: no es nada recomendable comprar un reloj inteligente o una pulsera cuantificadora sin tener claro qué es lo que se busca. Y es que más allá de las lógicas diferencias entre un reloj inteligente y una pulsera inteligente -por si alguien no está al tanto lo explicamos: el primero es una extensión del smartphone; mientras que la segunda es más bien un accesorio más básico en cuanto a posibilidades de interacción-, hay una serie de características que más interesan, como por ejemplo, el tener GPS, pulsómetro, que sea resistente al agua, o que monitorice la actividad física o el sueño. Por ello debemos tener claro qué buscamos, puesto que es posible que nos arrepintamos al poco tiempo al haber adquirido un dispositivo que no cuente con alguna de éstas características, siendo ya la único opción tener que comprarte un nuevo dispositivo.
¿Para ver notificaciones, hacer deporte o ambos?
En resumen los usuarios que se hacen con un reloj inteligente o una pulsera cuantificadora se pueden dividir en tres grupos: los que buscan un accesorio que por comodidad les permita no tener que estar sacando el teléfono continuamente, pudiendo consultar cualquier novedad directamente desde el dispositivo wearable gracias a las notificaciones; por otro lado están aquellas personas cuya prioridad es monitorizar su actividad física; y por último encontramos la gente que busca ambos casos anteriores. Así, aquellas personas que no busquen cuantificar alguna práctica deportiva en definitiva pueden prescindir de características como el GPS o el pulsómetro, que sí serán muy importantes para los del segundo grupo.
El presupuesto
Pese a todo lo anteriormente comentado, el presupuesto es un aspecto vital a la hora de decantarte por un dispositivo wearable. Las pulseras ‘fitness’ tienden a la simpleza, a darte la información de lo que necesitas de base, sin florituras, de ahí que su precio sea menor; mientras que un smartwatch se trata de un dispositivo mucho más completo -y posiblemente caro-, por ello debes decir qué te conviene más.