A veces comprar regalos para toda la familia se nos hace cuesta arriba. Se agotan las ideas para pequeños y mayores, e intentamos buscar regalos originales. Para que este año no sea así, y para que además hagáis un guiño al medio ambiente… ¡Os dejamos varias ideas para hacer los regalos de Reyes más sostenibles!
Habitualmente, la carta para los magos de oriente se centra en los juguetes más codiciados, tecnología punta, perfumes, ropa cara y caprichos a veces incensarios.
¿Qué tal si este año somos más responsables con el consumo y hacemos regalos prácticos y sostenibles?
Si estás interesado en conocerlos, ¡sigue leyendo!
Terrario
¿Alguna vez has visto una pequeña planta dentro de un bote o botella de cristal? Seguro que la respuesta es sí que te cautivó al instante. Estamos hablando de los terrarios, que no es más que un mini jardín que se cultiva dentro de un recipiente.
Los terrarios son perfectos para decorar cualquier rincón del hogar. Además, son perfectos para las personas que son un desastre con las plantas. Las condiciones generadas en estos micro invernaderos de hace que no requieran demasiado cuidado.
Kit de cosmética natural
La cosmética natural es una gran desconocida. Hasta la fecha, las marcas generalistas la han eclipsado durante mucho tiempo, pero por suerte cada vez llega a más hogares.
Se está recuperando la ‘buena cosmética’, la que basa en elegir productos con más principios activos, más beneficiosos para la piel y que cuiden el medio ambiente. ¡Eso es la cosmética natural!
Moda ecológica
Regalar ropa es siempre una de las soluciones más socorridas. Para que vamos a engañarnos, nos gusta tener ropa nueva e ir a la última.
Pero, siempre hay opciones más sostenibles que otras. La moda ecológica intenta añadir un tinte de sostenibilidad a toda la cadena. Se utilizan materiales reutilizables, se dan unas condiciones de trabajo óptimas a las personas que fabrican las prendas y se intenta reducir las emisiones apostando por proveedores locales.
Ya conoces tres ideas para hacer los regalos de Reyes más sostenibles. ¡Al ataque!